La crisis energética que afecta a Tierra del Fuego ha desatado una ola de indignación entre los hoteleros de la región, quienes expresan su frustración ante la falta de respuestas concretas y soluciones por parte del gobierno provincial. Luis Di Giorgio, presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo de Tierra del Fuego, ofició de uno de los principales voceros en la denuncia de la grave situación que atraviesa el sector.

En declaraciones por FM Master’s, Di Giorgio confirmó que aún no han recibido ninguna convocatoria oficial del gobierno para abordar la problemática energética que afecta a los establecimientos hoteleros. “Reunión confirmada, todavía no. Entendemos que hay una posible convocatoria de la cual todavía no tenemos ninguna novedad”, afirmó, expresando su preocupación por la falta de comunicación y acción gubernamental.

El panorama que dibujó Di Giorgio es desalentador, con los cortes prolongados de energía que afectaron gravemente a los hoteles de la provincia. “Nosotros pedimos y demostramos la preocupación, habían empezado los primeros cortes. Se presumía que el futuro iba a ser así, que iba a ir en escalada a medida que fuese avanzando el invierno. Y bueno, finalmente sucedió eso”, recordó el presidente de la asociación, reflejando el clima de incertidumbre y malestar que impera en el sector.

La falta de respuestas claras y la ausencia de un interlocutor específico con el que comunicarse han exacerbado la crisis. “Tenemos una crisis energética parada en la puerta y reconocida, pero no entendemos muy bien lo que está pasando”, declaró Di Giorgio, subrayando la desconexión entre las autoridades y los afectados. Según él, la comunicación con el gobierno se limita a la figura del gobernador, sin la presencia de un representante técnico que pueda brindar información y soluciones concretas.

La situación se ha vuelto aún más crítica debido a los recientes cortes de energía, que han llegado a durar hasta 16 horas, como el del viernes último. “Estamos en una situación que vamos a tener que sentarnos a hablar muy firmemente a ver cómo arreglamos esto. Siempre hemos tenido predisposición, la vamos a seguir teniendo, pero necesitamos una respuesta. Y la respuesta tiene que ser concreta y decir qué vamos a hacer de ahora en más”, exigió Di Giorgio, destacando la urgencia de encontrar soluciones inmediatas y efectivas.

La crisis no solo ha afectado la operatividad de los hoteles, sino que también ha causado daños materiales significativos. Di Giorgio mencionó que “a tres hoteles se les quemaron las bombas presurizadoras de agua”, un problema adicional que se suma a la falta de energía. La combinación de cortes prolongados y la falta de agua ha puesto a los hoteles en una situación insostenible, complicando aún más la capacidad de ofrecer servicios básicos a los turistas.

El descontento de los hoteleros se ve exacerbado por la percepción de que el gobierno provincial está distraído con otros asuntos, mientras la crisis energética se agrava. “La parte gubernamental se preocupa por la reforma de la Constitución, la ampliación del ejido urbano. ‘Muchachos, estamos sin luz’, y nos vamos a seguir quedando sin luz en días de invierno, como estamos teniendo. Esto es una cuestión de la sociedad en su conjunto, no solo de los hoteleros. Es un problema entero que nos convoca a todos prácticamente”, subrayó Di Giorgio, apelando a una respuesta colectiva y coordinada para abordar la emergencia.

El presidente de la asociación también cuestionó la capacidad de infraestructura existente para soportar el aumento de demanda energética. “¿Se siguen habilitando los edificios que tienen todos los sistemas eléctricos? Nos falta energía y nos falta ¿porque no tenemos capacidad, porque qué cosa?”, se preguntó, resaltando la necesidad de una evaluación crítica de la infraestructura y los proyectos futuros.

Di Giorgio hizo un llamado urgente a la acción, exigiendo una planificación a largo plazo que contemple la adquisición de nuevos equipos y mejoras en la infraestructura energética. “Cada negocio tiene un sinfín de situaciones complejas, una gran complejidad en todo sentido. 16 horas sin luz es un montón, es demasiado, ya pasamos una instancia”, dijo, subrayando la necesidad de una respuesta inmediata y efectiva.

La crisis energética en Tierra del Fuego ha puesto al sector hotelero en una situación precaria, exigiendo una respuesta urgente y coordinada de las autoridades para evitar mayores perjuicios y asegurar la continuidad de los servicios esenciales. Mientras tanto, los hoteleros se mantienen en una espera incierta, tratando de gestionar la situación con los recursos limitados a su disposición y esperando una solución definitiva para una crisis que ha demostrado ser mucho más compleja de lo anticipado.