jueves 30 de enero de 2025 - Edición Nº226

Regionales | 27 ene 2025

Salta: reacción de Bolivia ante la decisión del Gobierno de levantar un muro de alambre de púas en Aguas Blancas

La valla metálica tendrá 200 metros y será como los de las canchas de fútbol. Buscará bloquear el ingreso ilegal de personas para obligarlas a pasar por Migraciones. El gobernador Sáenz respaldó la decisión. "Ni un paso atrás", según el Ministerio de Seguridad.


El municipio de Aguas Blancas, en el norte de Salta, llamó a licitación para levantar un muro de alambres de púas en la zona del paso fronterizo con Bolivia. La medida que impulsa el Ministerio de Seguridad de la Nación forma parte del "Plan Güemes" para fortalecer las fronteras del norte argentino y se adoptó tras un recorrido que hizo en diciembre por la zona la ministra Patricia Bullrich y el gobernador salteño Gustavo Sáenz. El gobierno del vecino país elevó una queja. "Los temas fronterizos deben ser tratados por medio de mecanismos de diálogo bilaterales establecidos entre los Estados para encontrar soluciones coordinadas a temas en común", señaló la cancillería boliviana.

 

Mediante la resolución 17/2025 A, que se publicó este lunes en el Boletín Oficial de Salta, la municipalidad de Aguas Blancas llamó a licitación para construir el alambrado fronterizo en el río Bermejo. Según los detalles, será similar al de las canchas de fútbol e irá desde la Terminal de Ómnibus de la ciudad argentina hasta las oficinas de la Dirección Nacional de Migraciones, por donde cientos de personas de ambos países entran y salen a diario. El Gobierno nacional, se aclaró, se hará cargo del costo de la obra que se denomina "Ejecución de alambrado perimetral Aduana Aguas Blancas Salta". Según la licitación, se instalará en la frontera entre las ciudad de Aguas Blancas, de nuestro país, y Bermejo (Bolivia), un alambrado de púas de 200 metros que tendrá dos o tres puertas.

 

De acuerdo a Virginia Cornejo, Directora Nacional de Vigilancia y Control de Fronteras del Ministerio de Seguridad de la Nación, en declaraciones a la prensa, el objetivo de levantar esa valla de alambre tiene como objetivo "combatir los delitos federales en la frontera norte de Salta, con el foco puesto en los departamentos de Orán y Aguas Blancas". Desde diciembre se desplegó en la zona un refuerzo de efectivos de distintas fuerzas federales.

 

Reacción

 

Tras darse a conocer la medida del Gobierno reaccionó la Cancillería de Bolivia con un comunicado que también colgó en la red social X. En este documento, sostiene que "los temas fronterizos deben ser tratados por medio de mecanismos de diálogo bilaterales establecidos entre los Estados para encontrar soluciones coordinadas a temas en común". Y advirtió que "cualquier medida unilateral puede afectar la buena vecindad y la convivencia pacífica entre pueblos hermanos". "El Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional de Bolivia solicitará a través de los canales diplomáticos la información sobre este tema para emprender las acciones que correspondan. Bolivia continuará apoyando el diálogo constructivo como la vía para solucionar los asuntos de común interés", cerró el comunicado.

 

Por otro lado, el ministro de Justicia boliviano, César Siles, calificó la decisión como una vulneración de los principios de convivencia pacífica y una posible contravención a los tratados internacionales. "Consideramos que el mandato del presidente de Argentina es vulneratorio de los principios más elementales de la convivencia pacífica en el nivel internacional. Esto iría en contra de los tratados internacionales”, declaró. Y advirtió que también solicitó que organismos como las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA) se pronuncien sobre el asunto. "Tanto Naciones Unidas y la Organizaciones de Estados Americanos deberían conminar estas determinaciones, esperamos que solo sea un anuncio y no algo real. Esperemos que el presidente de Argentina pueda reflexionar", sostuvo.

 

Aval provincial

 

En medio de la polémica, el gobernador Sáenz respaldó la decisión de levantar el muro de alambre de 200 metros, sobre una extensión de frontera con Bolivia de 742 kilómetros, entre Salta y Jujuy, de mayor presencia en suelo salteño. "Construiremos un cerco dentro del ejido urbano, entre la Terminal de Colectivos y la Oficina de Migraciones, para asegurar el cumplimiento normativo, proteger las vías legales de ingreso y ofrecer un entorno más seguro para todos", detalló. "Este control fronterizo efectivo reduce el riesgo de incidentes y contribuye a la coordinación de las fuerzas de seguridad, quienes podrán monitorear los movimientos y responder con prontitud ante posibles situaciones de riesgo", agregó también el mandatario provincial salteño.

 

En lo más álgido del debate público por la construcción de la cerca, también el Ministerio de Seguridad de la Nación se manifestó sobre su construcción, a la que describió como "una decisión clave para reforzar la pared existente -vulnerada repetidamente por el narcotráfico para ingresar cocaína- con la construcción de una cerca de 200 metros". "Esta medida refuerza los controles exitosos implementados desde el inicio del Plan y elimina el bypass que permitía evadir los operativos de la Gendarmería Nacional". El comunicado fue difundido en X.

 

"Narcofrontera"

 

El interventor del municipio de Aguas Blancas, Adrián Zigarán, designado en octubre por Sáenz porque el exintendente Carlos Martínez está detenido por la investigación de un asesinato, también defendió la decisión de la valla en varias entrevistas. "Yo tengo que ir más atrás de contar del alambrado. Decir que desde mi punto de vista la narcofrontera se había corrido dentro de Argentina, donde había como normales escenas de sicariato", sostuvo. "La situación se estaba desmadrando y aparecieron videos de gente que se hacía llamar patrón, gente con armas largas y pasamontañas. Ya tenemos destituido un juez de la zona, fiscales, policías y hasta bomberos voluntarios", agregó.

 

Zigarán argumentó que en ese escenario surgió la iniciativa de Sáenz, que respaldaron Bullrich y el presidente Javier Milei. "Con el alambrado se sacará a los gendarmes y se los pondrá a evitar que la gente esquive el control de migraciones y salga por debajo de la Terminal a una casa particular, en donde les cobran para entrar y salir del país", remarcó. "Este alambrado, que va a estar dentro de la parte urbana, va a ayudar a que la gente sí o sí pase por migraciones", cerró.

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